La decencia, el respeto y el consenso son fundamentales para sostener una conversación, sin importar el tema por tratar. En ocasiones, solo necesitas que te escuchen.
En cualquier caso, puedo simplemente escuchar o puedo aportar mi punto de vista; incluso, puedo dar un consejo, de ser necesario. No puedo juzgar. La vida me ha enseñado a entender que somos humanos.
Adelante. Aquí estaré.
Santiago F.